domingo, 3 de mayo de 2015

Carrilleras de ternera al vino tinto


¡Hola a tod@s!

¿Qué tal, familia? Lo primero de todo, felicitar a todas las madres del mundo, ¡el mejor invento de la historia!



Hoy os traigo unas carrileras guisadas para chuparse los dedos, con una salsita bien reducida de verduras y vino tinto. ¡Comenzamos!

INGREDIENTES

Carrillera de ternera
Puerro
Cebolla
Pimiento verde
Tomate
Apio
Ajos
Vino tinto
Brandy
Caldo de carne
Coliflor
Mantequilla
Laurel
Sal
Pimienta
Azúcar
Aceite de oliva


Tenemos aquí dos hermosas carrileras de ternera, con un magnífico color, y un buen vino joven para acompañarlo (nada de vinuchos, ¿eh?)


Lo primero que vamos a hacer, es limpiar un poco las carrilleras, quitando exceso de grasa y nervios.



Ahora, vamos a preparar una bresa con las verduras. Para ello, las pelaremos, lavaremos y trocearemos en pedazos medianos. La cabeza de dientes de ajo, directamente la cortaremos por la mitad, sin pelar ni nada.


Una cazuela honda, un dedo de buen aceite de oliva y la cabeza de ajos cortada al medio. Ahí, sin miedo.


A continuación, la bresa: pimiento, cebolla, puerro, tomate y apio, a la cazuela. Añadimos también sal, unos granos de pimienta, una hoja de laurel y tomillo, que se vaya sofriendo con las verduras.


Cuando las verduras hayan perdido bastante agua y estén blanditas, metemos las carrilleras.


 A pelo, sin sal, sin enharinar, ni nada.


Incorporamos un chupito de brandy, y dejamos cocinar hasta que evapore el alcohol.


Lo siguiente, el vino. Yo he elegido este Rioja, en particular, porque estaba de oferta. Aún así, creo que es un buen vino (no soy demasiado amante del vino), así que no escatiméis con la elección del mismo. También podeis usar un vino dulce, un Px o un Oporto. Yo siempre uso prefiero usar vinos más afrutados, antes que otros vinos con más cuerpo. Dicho esto, añadimos media botella de vino, dejamos que reduzca un poco, y añadimos el resto.


Terminamos de cubrir con caldo de carne. Yo he usado caldo de mi madre (oro líquido), pero si no tenéis, podéis usar uno de brick, uno de verduras, de pollo, o incluso agua.


Ponemos el fuego flojito pero que hierva, y nos olvidamos durante 2, 3, 4 horas... El mio en particular estuvo 4 horitas, a fuego muy flojito, desengrasando de vez en cuando y añadiendo agua o caldo si se me secaba demasiado. Ni que decir queda que la carne queda super tierna, se deshace prácticamente.


Una vez cocinadas, reservamos las carrilleras y dejamos que se enfríen, ya que quiero darlas una forma bonita, y en caliente se me desharían. Yo las dejé de un día para otro en la nevera.


Pasamos la salsa por un chino y la reservamos también. Este es el resultado de toda una mañana cocinando (mejor no pongo fotos de como ha quedado la cocina...)


Bueno, una vez fría la carne, vamos a cortarla de una forma bonita.


Yo he hecho unos tacos, pero podéis trocearla, filetearla o cortarla de la forma que más os guste.


De acompañamiento, voy a poner un poco de coliflor cocida, y luego salteada. Para ello, pongo una olla con agua a hervir, sal, una hoja de laurel y la coliflor. Por lo menos 20 minutos puede estar la coliflor cociendo, pero para estar seguros, debemos pinchar el tronco con un cuchillo y debe estar blandito.


Por otro lado, vamos a colar la salsa y la vamos a poner a reducir en una sartén. Fuego medio y esperar a que espese.


Cuando haya reducido la salsa a la mitad, vamos a introducir nuestra carrillera.


Vamos a napar la carne, esto es, a fuego suavecito vamos a bañar la carne con la salsa, ayudándonos con una cuchara.


Poquito a poco, despacito, sin parar de bañar la carne.


Hemos de conseguir una salsa bien espesa, parecida al chocolate. Podemos  añadir una cucharada de azúcar para ayudar a que caramelice.


Finalmente, salteamos al coliflor con una nuez de mantequilla y un poco de sal, a fuego fuerte un par de minutos al wok.


¡Y a emplatar!


La carne de las carrilleras está muy tierna y jugosa, es un bocado exquisito.


Dar las gracias a esos visitantes anónimos que, pese a que no actualice nada a menudo, siguen visitando el blog para consultar sus cosillas culinarias.


Felicitar, otra vez, a todas la madres, en especial a la mía, la mejor de todas, pero sobre todo a mi super mamá y compañera de viaje, la mejor persona que he conocido y la que endulza mis días. ¡11 años queriéndote!


¡Hasta la próxima!